Tierra de León

Tierra, Tierra, Tierra de León.
Tierra, Tierra, Tierra de León.
Tierra, Tierra, Tierra de León.
Tierra, Tierra, Tierra de León.

Siempre te encuentro llorando
por tu futuro esperando
que hoy es solo carbón,
tu hijo mayor de tantos años.

Te mueres León...
Te mueres León...

Tierra, Tierra, Tierra de León.
Tierra, Tierra, Tierra de León.
Tierra, Tierra, Tierra de León.
Tierra, Tierra, Tierra de León.

Siempre te encuentran cantando
tus monumentos mostrando
que ya no tienen señor
para dolor y desengaño.

Tierra que encierras engaños,
campos, montañas y paños,
que vives sin saber de qué,
lo sabes bien, somos extraños.

Te mueres León...
Te mueres León...

Tierra, Tierra, Tierra de León.
Tierra, Tierra, Tierra de León.
Tierra, Tierra, Tierra de León.
Tierra, Tierra, Tierra de León.

Riaño

Canto a mi tierra pequeña, tierra que me vio nacer
y aunque mi tierra no exista, yo la llevo aquí en mi ser
y aunque mi tierra no exista, yo la llevo aquí en mi ser.

Riaño, Riaño,
¡Lanza tus penas al viento,
que escuche el lamento que quiebra tu voz!
deja que aquellos que un día forjaron tu ruina,
contemplen su error.

Llenas las sendas de ruido,
buscando el olvido, inician su marcha.
Atrás quedan los recuerdos
y los tiempos bellos, lejanos sin alba.

Quedan casas destrozadas,
arboles tronchados, desechos, sin ramas.
Ahí es donde en otros tiempos
jugaron los niños, hoy ya no son nada.

¡Lanza tus penas al viento,
que escuche el lamento que quiebra tu voz!
deja que aquellos que un día forjaron tu ruina,
contemplen su error.

Riaño, Riaño, lanza tus penas al viento
que escuche el lamento que quiebra tu voz
deja que aquellos que un día forjaron tu ruina,
contemplen su error.

Alguien quiso que murieras
para que otras tierras bebieran tus aguas.
Arrasaron tus praderas
sin mirar siquiera que tu protestabas.

Nadie escuchaba tus quejas,
quisieron callarte con falsas palabras.
Pero tu sangre, Riaño, corre por tus venas
y tú no te callas.

¡Lanza tus penas al viento,
que escuche el lamento que quiebra tu voz!
deja que aquellos que un día forjaron tu ruina
contemplen su error.

Riaño, Riaño,
¡Lanza tus penas al viento,
que escuche el lamento que quiebra tu voz!
deja que aquellos que un día forjaron tu ruina,
contemplen su error.

Jota de Boñar

Como se canta:

Dos cosas tiene Boñar,
dos cosas tiene Boñar
que no las tiene León:
el maragato en la torre
y en la plaza el negrillón,
el maragato en la torre
y en la plaza el negrillón.

Que cuando llueve, leré, calzo madreñas
suenan los clavos, leré, sobre las peñas,
sobre las peñas leré, sobre las rocas,
que cuando llueve, leré, calzo galochas.

Por bailar, y no bailé,
yo a la romería fui,
por bailar, y no bailé,
perdí la cinta del pelo,
mira lo que yo gané...
perdí la cinta del pelo,
mira lo que yo gané...

Que cuando llueve, leré, calzo madreñas
suenan los clavos, leré, sobre las peñas,
sobre las peñas leré, sobre las rocas,
que cuando llueve, leré, calzo galochas.

No te debe entristecer
perder la cinta del pelo,
no te debe entristecer...
de una mujer en el baile
qué menos se puede perder,
de una mujer en el baile
qué menos se puede perder.

Que cuando llueve, leré, calzo madreñas
suenan los clavos, leré, sobre las peñas,
sobre las peñas leré, sobre las rocas,
que cuando llueve, leré, calzo galochas.


Como la canta Aldaba:

Por bailar, y no bailé,
yo a la romería fui,
por bailar, y no bailé,
perdí la cinta del pelo,
mira lo que yo gané...
perdí la cinta del pelo,
mira lo que yo gané...

Que cuando bailo, leré, calzo galochas,
suenan los clavos, leré, sobre las rocas,
sobre las rocas, leré, sobre las peñas,
que cuando llueve, leré, calzo madreñas

No te debe entristecer
perder la cinta del pelo,
no te debe entristecer...
de una mujer en el baile
qué menos se puede perder,
de una mujer en el baile
qué menos se puede perder.

Que cuando bailo, leré, calzo galochas,
suenan los clavos, leré, sobre las rocas,
sobre las rocas, leré, sobre las peñas,
que cuando llueve, leré, calzo madreñas.

Dos cosas tiene Boñar,
dos cosas tiene Boñar
que no las tiene León:
el maragato en la torre
y en la plaza el negrillón,
el maragato en la torre
y en la plaza el negrillón.

Que cuando bailo, leré, calzo galochas,
suenan los clavos, leré, sobre las rocas,
sobre las rocas, leré, sobre las peñas,
que cuando llueve, leré, calzo madreñas

Ay, guindilla, guindilla

Todos los enamorados
tienen pleito con la luna,
la luna por alumbrarlos
y ellos por andar a oscuras.

Como quieres niña que te vaya a ver
si vengo del campo al anochecer,
mientras que me lavo y encierro al ganado,
cuando voy a verte ya te has acostado.
Llamo a tu ventana y no quieres abrir,
éstas son las penas que paso por ti.

Ay guindilla, guindilla, guindilla,
que ya no te quiere la de la toquilla
ay guindilla, guindilla, guindón,
que ya no te quiere tu novio el guasón.

Como quieres que te dé
lo que no te puedo dar,
el anillo de mi dedo
si no lo puedo quitar.

Como quieres niña que te vaya a ver
si vengo del campo al anochecer,
mientras que me lavo y encierro al ganado,
cuando voy a verte ya te has acostado.
Llamo a tu ventana y no quieres abrir,
éstas son las penas que paso por ti.

Ay guindilla, guindilla, guindilla,
que ya no te quiere la de la toquilla
ay guindilla, guindilla, guindón,
que ya no te quiere tu novio el guasón.

Si supieras y entendieras
las penas que el amor daba,
subirías por las paredes
como la hiedra enramada.

Como quieres niña que te vaya a ver
si vengo del campo al anochecer,
mientras que me lavo y encierro al ganado,
cuando voy a verte ya te has acostado.
Llamo a tu ventana y no quieres abrir,
éstas son las penas que paso por ti.

Ay guindilla, guindilla, guindilla,
que ya no te quiere la de la toquilla
ay guindilla, guindilla, guindón,
que ya no te quiere tu novio el guasón.

Jota de la Bañeza

Dicen que la pena mata,
yo digo que no, que no,
que si la pena matara
ya me habría muerto yo.

Ayer te quise, hoy no te quiero,
tuve ese gusto, hoy no lo tengo.
Hoy no lo tengo ni me acomoda,
galán, contigo no quiero boda.

Asómate a la ventana,
para decir un te adoro,
quiero encender un cigarro
con el fuego de tus ojos.

Ayer te quise, hoy no te quiero,
tuve ese gusto, hoy no lo tengo.
Hoy no lo tengo ni me acomoda,
galán, contigo no quiero boda.

Me llamaste morenita,
la culpa fue de la nieve,
por no compartir conmigo
la blancura que ella tiene.

Ayer te quise, hoy no te quiero,
tuve ese gusto, hoy no lo tengo.
Hoy no lo tengo ni me acomoda,
galán, contigo no quiero boda.

Amores de viejos tiempos
quisiera volver a verlos,
hacerles unas preguntas
si quieren volver a serlo

Ayer te quise, hoy no te quiero,
tuve ese gusto, hoy no lo tengo.
Hoy no lo tengo ni me acomoda,
galán, contigo no quiero boda.

Este pandero que toco
tiene lengua y sabe hablar,
sólo le faltan los ojos
para ayudarme a llorar.

Ayer te quise, hoy no te quiero,
tuve ese gusto, hoy no lo tengo.
Hoy no lo tengo ni me acomoda,
galán, contigo no quiero boda.

Despedida por un año,
despedida por las flores,
Una despedida sola
tuve yo con mis amores.

Ayer te quise, hoy no te quiero,
tuve ese gusto, hoy no lo tengo.
Hoy no lo tengo ni me acomoda,
galán, contigo no quiero boda.

Tiene León

A León y su provincia,
con el corazón le canto,
porque es una maravilla,
es la tierra del encanto.

Tiene valles y montañas
y tiene extensos llanos,
preciosos ríos lo bañan
con sus presas y pantanos.

Sus gentes encantadoras
transmiten cordialidad,
y al forastero que llega,
a él le ofrecen su amistad.

Tiene, tiene León, su esbelta Catedral.
Tiene, tiene León, San Marcos gran hostal.
Tiene, tiene León, sus preciosas mujeres
que a los hombres locos tienen
porque muy bonitas son.

Tiene, tiene León, la estatua de Guzmán
Tiene, tiene León, su casco artesanal
Tiene, tiene León, las fiestas de San Juan
que terminan en San Pedro
y a tope de gente están.

Que bonita es Ponferrada
con su castillo elegante.
Le dan fama a la Bañeza
sus alegres carnavales.

Con sus ferias y sus minas,
Fabero y Villablino.
Villafranca y Cacabelos
porque tienen un buen vino.

Astorga, sus mantecadas.
Por bella iglesia, Boñar.
Por su turismo Valderas
y Valencia de Don Juan.

Tiene, tiene León, su esbelta Catedral.
Tiene, tiene León, San Marcos gran hostal.
Tiene, tiene León, sus preciosas mujeres
que a los hombres locos tienen
porque muy bonitas son.

Tiene, tiene León, la estatua de Guzmán
Tiene, tiene León, su casco artesanal
Tiene, tiene León, las fiestas de San Juan
que terminan en San Pedro
y a tope de gente están.

La peregrina

Camino de Santiago,
con grande halago,
mi peregrina la encontré yo;
al mirar su belleza,
con gran presteza,
mi peregrina se hizo al amor.

En la oscura maraña
de una montaña
mi peregrina se me perdió.
Y mi pecho afligido,
preso y herido,
por esos montes suspiros dio.

En los prados y flores
de mis amores,
a los pastores les pregunté
quién vio a una morenita
peregrinita,
que el alma irrita con su desdén.

Por ver si mi desvelo
halla consuelo,
todas sus señas daré también.
Iba la peregrina
con su esclavina,
con su cartera y su bordón;

Lleva zapato blanco,
media de seda,
sombrero fino que es un primor.
Lleva rubio el cabello,
tan largo y bello,
que el alma en ello se me enredó;

En la su fina ceja,
de oro madeja,
su amor y el mío se aprisionó;
sus ojos y pestañas
son dos montañas,
donde dos negros hacen misión.

Viva Dios que nunca muere

Viva Dios que nunca muere
y si muere resucita
viva la dama que tiene
la cintura delgadita.

Amor mío quiéreme a mí
que gasto zapatos de pitiminí,
amor mío y a mí la primera
que gasto peineta, pañuelo de seda.

No sé cómo no florece
la escalera de tu casa,
subiéndola quien la sube
bajándola quien la baja.

Amor mío quiéreme a mí
que gasto zapatos de pitiminí,
amor mío y a mí la primera
que gasto peineta, pañuelo de seda.

No canto porque bien canto
ni porque soy cantadora,
canto por dar que decir
a lenguas murmuradoras.

Amor mío quiéreme a mí
que gasto zapatos de pitiminí,
amor mío y a mí la primera
que gasto peineta, pañuelo de seda.

Me diste tacha de pobre
otra que tal vez no tienes
mi sangre no está manchada
que vale más que tus bienes.

Amor mío quiéreme a mí
que gasto zapatos de pitiminí,
amor mío y a mí la primera
que gasto peineta, pañuelo de seda.

Eres hija de buen padre
de buena madre cristiana
y tú también serás buena
de buen tronco buena rama.

Amor mío quiéreme a mí
que gasto zapatos de pitiminí,
amor mío y a mí la primera
que gasto peineta, pañuelo de seda.

Aunque tu padre te dé
las mulas y el palomar
no me casaré contigo
porque tienes mal mirar.

Amor mío quiéreme a mí
que gasto zapatos de pitiminí,
amor mío y a mí la primera
que gasto peineta, pañuelo de seda.

La redondilla

Con un polvo y otro polvo
se levanta polvareda
con un vaso y otro vaso
se coge una filosera.